Calandria grande
Mimus saturninus
Mimidae
27 cm. Presenta un plumaje de colores apagados, con el dorso pardo grisáceo con rayas más oscuras poco perceptibles. Las alas son más oscuras, con ribetes blancos en algunos ejemplares, así como la cola, que muestra al vuelo dos distintivas manchas blancas. El vientre y la garganta son blanquecinos.
El pico es largo y delgado, bien adaptado a la
captura de insectos. Los tarsos de las patas son largos, indicando su hábito de
caminador.
Tiene la
capacidad de imitar el canto de otras
aves como también sonidos urbanos como sirenas, alarmas, etc.
La calandria es
insectívora y frugívora. Habita en zonas de estepa y pradera, sin migrar en
invierno. Pasa la mayor parte de su tiempo en el suelo, desplazándose con
cortas carreras a buena velocidad
Nidifica a
comienzos de primavera, participando tanto macho como hembra en la
construcción. El nido es cóncavo y profundo, de aspecto desprolijo. La hembra
deposita entre 2 y 5 huevos por postura, de color celeste con manchas
pardorrojizas; la incubación de los mismos insume unas dos semanas, y es
llevada a cabo por la hembra.
Los pichones son
nidícolas, y permanecen en el nido unas dos semanas después de la eclosión,
siendo alimentados por sus padres. Al abandono del nido se ocultarán en el follaje,
aprendiendo de los padres la captura de presas y siguiéndolos durante un mes o
más.
La calandria es
víctima del tordo renegrido, Molothrus bonariensis, que parasita su nido
picando los huevos de la calandria y depositando el suyo propio, de menor
tamaño, para que aquellas lo críen.
Ampliamente
distribuida en América del Sur.